El delincuente fue identificado como Hernán Cristian Báez Amarfil. Tenía 31 años y un importante prontuario.
Un grupo de vecinos mató a golpes a un delincuente tras un intento de robo en la localidad mendocina de Guaymallén. El ladrón muerto se llamaba Hernán Cristian Báez Amarfil y había salido de la cárcel cuatro días antes.
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| El Ladrón se llamaba Hernán Cristian Báez Amarfil. |
El crimen sucedió este fin de semana cuando el hombre de 31 años intentó entrar a robar a una casa del barrio Lihué y fue descubierto por los vecinos.
Aunque la primera reacción fue dar aviso a la policía, antes de que los efectivos pudieran llegar al lugar y para evitar que el asaltante se fugara, la turba lo redujo y la situación se desmadró.
En medio del tumulto, algunas personas empezaron a golpear salvajemente a Báez Amarfil hasta dejarlo inconsciente en el suelo, señalaron desde el medio Mendoza Today.
Cuando llegó una ambulancia, los médicos intentaron reanimarlo con maniobras de RCP, pero pocos minutos después confirmaron la muerte del delincuente.
La investigación
La Unidad Investigativa de Delitos de Guaymallén, personal de Homicidios, junto con Científica e Infantería, trabajaron en el lugar para llevar a cabo las pericias correspondientes.
El resultado preliminar del informe de los forenses determinó que Báez Amarfil murió como consecuencia de las lesiones provocadas por la golpiza.
Tras la muerte del ladrón, los investigadores constataron que tenía un amplio historial de antecedentes, entre ellos robos, lesiones y tenencia ilegal de armas de fuego.
Por estas horas la Fiscalía de Homicidios, a cargo del caso, analiza la participación del grupo de vecinos implicados en el linchamiento. Hasta el momento, sin embargo, no se informaron medidas judiciales.
En diálogo con Cadena 3, el abogado penalista Pedro Despouy Santoro se refirió a las posibles responsabilidades de estas personas y señaló que podrían enfrentar cargos por homicidio culposo o por exceso en la legítima defensa, dependiendo de las circunstancias del caso.
"Si hay exceso en la legítima defensa de un tercero, habrá una responsabilidad a título de culpa o imprudencia", explicó el letrado.
Fuente de la información: Diario Época.
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